Bienvenidos

Hola a todos a este blog, espero que os guste lo que leais

ÍNDICE DE INMORTALES

Paula Tomás Esteban David Irene Lucía Silvia Ángela Saray Adrián Vampiros creados a partir de Adriático.
Pablo Rebeca Cris Alfonso Inmortales por mediación mágica.
Aurora Miguel Carlos Raúl Vampiros creados por alguien de la lista.
Sandra Fue la única que quiso ser vampira por voluntad propia.
Tiziano Muñeco de barro Inmortal.

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Mi vampiro preferido

Mi vampiro preferido
Jared Leto

sábado, 12 de enero de 2013

nuevo personaje

En mi libro va ha haber un nuevo personaje que va a ser muy especial y que va a tener libro propio. Y con esto digo que será una saga, siendo el presente el primero de no sé cuantos libros. La cantidad dependerá de vosotr@s. Y gracias por leer este blog.

CAPÍTULO 30

Diego tardó algo en reaccionar. -¿Cómo lo sabes? -Porque soy la Fuente y él es un vampiro. Confía en nosotros. -Soy un puto de sangre desde hace unos años. -¿Quieres ser parte de la Familia Real o quieres ser humano? -Quiero ser vampiro Sergio pero… -No tengas miedo, dilo. -Mi señor no quiere que sea vampiro porque no quiere alimentarse de otro vampiro. Diego miraba a Til con miedo y yo sabía porqué. -No le tengas miedo, no es tu señor. Es el cuerpo pero su alma es distinta, es el alma de Til. -¿Qué? -Sí, es decir… -¡Que mi señor está muerto para siempre! Asentí y Diego empezó a dar saltitos mientras que Til y yo lo mirábamos. -Cuando termines tu turno pásate por nuestra casa y hablamos con más tranquilidad. Diego asintió y se marchó, entonces Til me encaró y me dijo. -¿En qué cuerpo me has metido? -En uno que tenía ganas de matar y que sabía que era lo suficientemente fuerte como para aguantar lo que le hice. -Me refiero a lo que acabo de ver y oír. -Digamos que era un torturador de humanos inocentes y ya sabes que no me gusta nada que se cometan esas cosas. -Bueno… Lo que sacamos en claro es que uno de los dos lo va a convertir. -En realidad tú lo vas a convertir en vampiro. ¿Otra copa? -Eres mala, muy mala… ¿Otra a estas horas? ¿Quieres que tenga más resaca? -NOOOOOOOOOO. ¿Cómo puedes pensar eso? Le sonreía mientras nos servía otra copa, brindamos por lo sucedido y por lo que va a suceder.

CAPÍTULO 29

-¿Qué vas a hacer ahora? -Pues iba a preparar algo especial, pero necesito tu ayuda para eso. Til sonrió mientras asentía, ya sabía lo que estaba pensando y me gustaban. Diego entró en el despacho con un carrito con bebidas y con una sonrisa de oreja a oreja. Se podría decir que esa sonrisa estaba también en sus ojos azules. -Ya están fuera todos y los guardias tuvieron que usar fuera bruta. -Gracias por la información. -Y en agradecimiento esto es de parte de todos los empleados. -¿Lo teníais guardado? Diego asintió avergonzado y nos sirvió un vaso de tequila. -Brindemos por la desaparición de los malvados y por el inicio de una nueva era. -¡Salud! Y nos bebimos el vaso de un trago. Diego se iba dejándonos allí las bebidas. -Espera Diego que quiero hablar contigo. -¿Por qué? -No sientas miedo Diego. ¿Desde cuándo eres puto de sangre? Se quedó sin aliento y Til con la boca abierta.

CAPÍTULO 28

Me senté en la silla y llamé a recepción, -¿Diego? ¿Puedes llamar al abogado por favor? [-El abogado sube en este momento jefa.] -Gracias Diego.- Colgué.- Esperemos a que llegue el abogado. Esperamos poco y en cuanto entró por la puerta dijo. -Señores les traigo los papeles que dicen que ya son los dueños íntegros de la empresa. -Déjeme verlos por favor. Dije tras los otros accionistas, que se retiraron para dejar ver al abogado que estaba yo ahí, viva. Se asustó al verme sentada en la silla del jefe. -Pensaba, como los aquí presentes –Señalé a los accionistas- que estaba muerta. No dijo nada mientras se acercaba y me ofrecía los papeles. -Como se dice en mi país, el que calla otorga. Revisé los papeles mientras lo decía. -Sergio. -¿Sí jefa? -¿Podrías darle al abogado los papeles que he traído? -Por supuesto.- Til le tendió una copia.- Tenga, aquí tiene. -Hay cuatro copias más, que dicen lo mismo que esa. En cuanto usted dé el visto bueno y hablado con sus clientes me avisa. Ya había terminado de leer lo que el abogado había traído. -Como verá es un buen trato para usted y sus clientes, que tras intentar asesinarme un par de veces… -¡¿QUÉ?! -Sí. ¿No lo sabía?- Negó con la cabeza.- Bueno… Pues espero que le parezca un buen trato, después de lo que pasó. ¿No le parece? -Sí me parece perfecto. Tanto mis clientes como yo mismo vamos a firmar estos papeles. Til les tendió el resto de papeles a los otros tres hombres y a mí la cuarta. -Han de firmar también esta cuarta copia para tenerla yo como justificante de que están conforme. Todos asintieron y firmamos todos los papeles que había. Tras esto llamé a seguridad y cuando llegaron les dije: -Acompañen a estos hombres a recoger sus cosas y a la salida. Si se resisten les dejo que utilicen la fuerza bruta. Los guardias sonrieron a decir la última parte ya que tenían ganas de pegarles.

CAPÍTULO 27

A la mañana siguiente me despertó Til diciendo: -Paula recuerda que tenemos que irnos a trabajar. Me desperté algo dormida y fui al baño, me duche y me vestí, luego salí y desayuné. Fuimos a la empresa y entramos encontrándonos con Diego, que nada más verme me dijo: -Hola Paula. ¿Quieres que avise al resto de accionistas de tu presencia? -No gracias. ¿Están en mi despacho? Diego asintió, tanto Til como yo nos dirigimos hacia el ascensor que nos llevaba a mi despacho. Al entrar nos encontramos con los tres accionistas que estaban festejando que tenían el control de la empresa. -Buenos días señores. Se dieron la vuelta para mirarnos. -Espero no interrumpir nada importante. -No.- Corrieron a decir. -Si me disculpan voy a sentarme en mi silla. Se tuvieron que apartar porque me vieron la cara de pocos amigos.

CAPÍTULO 26

El mismo día de mi transformación me fui a Escocia para trabajar y hacer valer mi poder en la empresa ya que tenía el 51% de las acciones. Cuando me puse a hacer las maletas los Inmortales ya me las tenían preparadas y metidas en el coche. -Gracias chicos.- Abracé a todos.- ¿Dónde está Til? -Está dentro de la casa preparando algunas cosas para el viaje. -Ya estoy aquí. ¿Nos vamos Paula? -Sí, venga sube al coche y ponte el cinturón. Til entró en el coche y se puso el cinturón, yo me despedí de todos de nuevo y entré en el coche. Cuando fuimos hacia la Avenida Príncipe de Asturias le pregunté a Til: -¿Quieres ir a esta velocidad o más rápido? -Ya me conoces y sabes la respuesta a esa pregunta, quiero ir más rápido. Me reí y pisé a fondo el acelerador, y para el resto de usuarios fuimos una mancha gris. Con ese ritmo llegamos a la frontera en 15 minutos, que antes de llegar disminuí la velocidad para pasar. Y en cuanto la pasamos volví a pisar a fondo, hasta llegar a París. Me metí en la ciudad y fui en busca de algún restaurante. -Llevo comida en la mochila. -Esa déjala para cuando lleguemos a Escocia. -Vale… ¿Y a dónde vamos a comer? -A un restaurante que te va a encantar porque es de nuestro estilo. -¡Qué bien! Dejé el coche lo más cerca posible del restaurante y al bajarnos fuimos hacia allí. Al llegar al restaurante le dije al que estaba allí que había hecho una reserva a mi nombre y nos acompañó hasta la mesa que tenía mi nombre. Nos dejó las cartas de la comida y Til dijo: -Me encanta este lugar. ¿Cómo lo encontraste? Y lo más importante… ¿Cuándo? -Lo encontré hace unos meses, cuando la empresa me envió aquí. Y fue de casualidad, un día que estaba lloviendo. -Cuenta más. ¿Sabes qué? No entiendo nada de la carta así que te dejo a ti escoger por mí. -Entré y tardaron en atenderme. Y de la que me iba me encontré con un grupo que nos gusta. Bueno… Uno de los dos grupos. -¿Rammstein o 30 Seconds To Mars? -El segundo. Y me quedé mirándoles fijamente y me invitaron a comer. -Hay algo que no me cuentas y creo que es algo muy embarazoso. -No te creas que es embarazoso. ¿Recuerdas aquel prototipo de coche que hice? -¿Cómo olvidarlo? Vino un camarero y le pedí la especialidad de la casa poco hecha. -¿Qué le has pedido? -Aquí hacen una carne muy buena y se la pedí. -¿Y qué tiene que ver ese prototipo con el grupo? -Pues que ellos iban en ese prototipo y les pregunté si era de ellos. -¿Te dijeron que sí? -Sí y Shannon me preguntó el motivo de mi pregunta. Y le dije que lo había creado yo y me estuvieron preguntando sobre el trabajo que hacía. -¿De verdad? Y… ¿Cómo son? Parezco un niño en Navidad. -Son muy majos y estuvieron interesados en la empresa. ¿Recuerdas aquel cliente secreto que sólo tu padre y yo sabíamos quién era? -Sí lo recuerdo, ni tan siquiera se lo dijeron a mi hermano. Espera… ¿Eran ellos? -Más bien era Shannon, que le encantan los coches y quería que yo hiciese unas muestras para unos coches que tenía. -¡Que me da algo! ¿Sigues en contacto con él? -Sí, cada dos semanas me pide lo más nuevo que tenga y que nadie más tenga. Por supuesto yo he de tenerlo antes. -Por supuesto, para probarlo y mandarlo. -Exacto. No me voy a jugar el nombre de la empresa y el mío por alguna cosa defectuosa. Llegó el especial de la casa y el camarero le preguntó a Til que vino quería beber. -Perdone, hable conmigo que él no entiende nada de francés. -Discúlpeme señorita. ¿Qué vino querrán tomar? -Vino tinto, cosecha del ’78. -Ese vino es muy caro señorita. -Lo sé por eso se lo pido. Y si es rápido puedo dejar una buena propina que llevará su nombre. El camarero se fue y Til me preguntó: -¿Qué dijo? -Quería que pidieras un vino y le pedí el mejor. -Y te dijo que era caro. -Sí y para darle más motivación le dije que le iba a dejar una buena propina. -Chica lista. Me gustaría preguntarte tantas cosas sobre 30 Seconds To Mars que no sabría por dónde empezar. -Te voy a decir algo que te va encantar más que este lugar dónde les conocí. -¿El qué? ¿Qué me los presentaras? -En su día sí, pero de momento vas a ser el intermediario entre ellos y yo. -Sí eso me gusta. ¿Voy a ser tu secretario? -Sí como te dije una vez. Pero entre nosotros te llamaré Til pero cara al publico te llamaré Sergio. -¿Sergio? ¿El dueño de este cuerpo? -Sí. ¿Qué te parece la idea? -Me parece una estupenda idea. Por cierto la propina al camarero la podemos poner a medias. -Eso sí que no te lo permito, la pongo yo ya que te invito. Llegó el camarero y me echó un poco de vino en el vaso, lo probé y asentí. Dejó la botella allí a petición mía. Empezamos a comer y estuvimos allí alrededor de una hora. Que al salir pagué la comida y les dije: -Quisiera dejar el 20% de la cuenta en concepto de propina al camarero que nos atendió, y espero que ese porcentaje le llegue integro al camarero porque si me entero de que no ha sido así no volveré más y hablaré muy mal de este lugar a mis clientes. Me dijeron que se la iban a dar en ese momento y me quedé a verlo porque no me fiaba de ellos. Me acerqué al camarero y le dije: -Toma mi tarjeta y si en algún momento ves que te quitan este dinero extra me llamas y vuelvo a buscarte para otro negocio mejor. El camarero asintió y nos fuimos de allí dirección Escocia. Fuimos muy despacio en comparación como salimos de España, pero cuando pasamos el canal de la mancha empezamos a ir más rápido hasta llegar a Edimburgo. En cuanto llegamos al edificio del piso bajamos todas las maletas y subimos al piso. Que al entrar vimos que era bastante espacioso. -¡Joder! Si el piso que teníamos alquilado aquí era la mitad. ¿Decías que teníamos cerca pubs? -Sí, a lo que todo lo que acabas de decir. -¿Y la empresa? -Ahí enfrente. Y ya sé en lo que piensas, vamos a acabar haciendo lo mismo que en Alemania. -Tienes que llamar a Pablo para que no se preocupe y para que luego no me diga que no te dije nada. Mientras Til me decía eso ya estaba llamando a casa. [-¡Hola! ¿Habéis llegado bien?] -Sí. [-¿Cuándo quedamos para hacer una fiesta?] -No os preocupéis que ya os aviso. Colgué el teléfono y Til se fue sin que me enterase. -¿Til? -¡ESTOY EN MI HABITACIÓN! -¿Qué coño haces? -No me puedo creer que tenga esta habitación. -Lo sé Til. -¿Qué querían los Inmortales? -Saber cuándo podían venir para hacer una fiesta. -¿Cuándo? ¿Dónde? -Cuando arreglemos todo aquí y ya sabemos lo que vamos a hacer después de eso. -Nuestra fiesta privada. Asentí y deshicimos las maletas en nuestras respectivas habitaciones. Cuando terminamos comimos algo para hacer tiempo. -¿Dónde está la empresa? -Ahí enfrente Til y los pubs… Hay uno aquí abajo y otros dos en esta misma calle. -¿Cuándo vamos a ir a arreglarlo? -Mañana por la mañana, así que esta noche vamos a salir… -Así que a prepararnos un poco. Nos fuimos a preparar y salimos del edificio para entrar al pub. Estuvimos allí hasta poco antes del cierre del local.

CAPÍTULO 25

Al llegar a casa olí un aroma que me era familiar. Era un olor a flores recién cortadas, ese olor era característico de Sahn. Lo estuve buscando por la casa y cómo no le vi seguí el olor hasta el sótano, dónde le encontré en la posición de meditación. -Me alegro de verte mi pequeña belleza lunar. -Hola Sahn. ¿Qué te trae por aquí? -En busca de la nueva fuente. -¿En quién pensaste? -En ti, Paula. Eres la más pura a la que puedo pedir este favor tan grande. -No puedo aceptar ese don. De repente Sahn perdió el equilibrio y fui a cogerlo antes de que su cabeza pegase contra el suelo. -¿Ves? Me gustaría que otro fuese la Fuente pero sólo confío en ti para esto. En ese momento llegaron los Inmortales y Pablo estaba en posición de ataque pero Rebeca le frenó negando con la cabeza. -Pablo te presento a Sahn, la fuente de la vida que vivimos. -Y el que inició su linaje junto a Kara.- Dijo Rebe. -¿Por qué le vas a confiar algo? -Porque es la única que podría hacer la tarea que le encomiendo. Empecé a llorar porque no quería que Sahn muriese, porque si él moría todos moriríamos y lo que hice no tendría ningún sentido para nadie. -No llores por mí. Estaba escrito en las estrellas. -¡¿QUÉ?! -¡Paula no puede hablar en serio! ¡Tú no puedes aceptar eso! -Es su destino, ha de aceptar. Necesitaba unos minutos para pensar pero sabía que Sahn no los tenía. -Aunque me pese toda mi vida esta decisión, voy a aceptar Sahn. -Paula… -Pablo calla. Acepta para que vivamos todos nosotros. -Pero Cris… -Ni peros ni nada Pablo. ¿Quieres que ella viva o que muera? -Por supuesto quiero que viva. -Por eso acepta para salvarnos a todos y a ella misma. Sahn me explicaba mentalmente lo que tenía que hacer para ser la nueva Fuente. Le mordí en el cuello para beber toda su sangre, cuando acabé de beberla me separé y nuestros cuerpos empezaron a convulsionar. El mío para que se operase el cambio y el de él para desaparecer. Me desmayé y no sé lo que pasó tras eso. Cuando empecé a sentir algo a mi alrededor supe que Til estaba allí intentando que Pablo me dejase un poco de espacio para que pudiese terminar mi transición. Sentí la mano de Til en mi mano y su voz en mi oído: -Cuando quieras despiértate, esa es la última fase. Ver con tus nuevos ojos y alzarte con tu nueva condición de Fuente… -De toda vida mágica. Mi voz sonaba rara con estos nuevos oídos. Fui conectando todos los nervios para que mis extremidades funcionasen. No me llevó mucho tiempo ponerme en pie y abrir los ojos. Lo vi todo con energía renovada, fui consciente de todo y de todos. Y lo que vi en sus caras me puso nerviosa, así que entré en sus mentes y pude ver con sus ojos. -¿Qué pasa? ¿Qué veis? -Mi reina, todos los aquí presentes estamos admirando su belleza. -Til no me vengas con esos tratamientos y explícame de una puta vez lo que ves. -Vemos que tienes un aura mucho mayor que antes que nos hace arrodillarnos ante ti. Y lo hicieron, de repente aparecieron los vampiros e hicieron lo mismo. Me acerqué a Pablo y le dije: -Pablo tú no has de hacerlo ya que eres mi consorte. -¿Por qué? -Vas a ser mi marido… Dentro de un año. Se quedaron un poco parados. Pero luego reaccionaron cómo quería, nos felicitaron. Aunque Til se quedó apartado, me acerqué a él y le pregunté: -¿Qué te pasa Til? -Es que luego me tocará a mí. Y no tengo pareja mi señora. -Til te voy a dejar unas cosillas claras ahora, vas a tener pareja y deja de llamarme mi señora o mi reina porque eres parte de mi familia. -Es decir que soy parte de la Familia Real. ¿Cuándo voy a tener pareja? -Muy pronto y además es alguien que conoces. -¿De verdad? Asentí y nos abrazamos. -¿No tenías que ir a Escocia? -Sí es verdad. Te tienes que venir conmigo para que seas mi secretario. -¿Tu secretario? -Sí, tranquilo que te pagaré bien. -Eso espero. -Y cuando se cierre por completo voy a empezar a trabajar en el mundo de la moda. Tú serás mi mejor modelo. -¿Me pagarás más? -Por supuesto. Si algo sabía de Til es que si había dinero por medio le daba igual a dónde ir. De ahí que confiara en él el resto de nuestras vidas. Aunque en ese momento no quería pensar en el trabajo en eso, quería pensar en qué podía hacer con las cenizas de Sahn. -Chicos… -¿Sí? -Mejor que os quedéis aquí durante el día, mientras yo voy a hacer el ritual para despedirme de Sahn. -Vale Paula. Empecé a recoger las cenizas de Sahn mientras el resto se iban a dormir. Lo que no esperaba era que Til me ayudase con las cenizas. -Gracias Til. -¿A dónde vamos a hacer el ritual? -A la campa torres, que desde allí se ve todo Gijón. -Vale. ¿Vamos en coche o por otro medio? -Por el otro medio es más rápido, no quiero a curiosos. Til asintió, terminamos de recoger las cenizas y fuimos a la campa torres. Cuando llegamos Til me dejó espacio para poder hacer el ritual de cambio de Fuente y de despedida. -Sahn siempre quisiste ver Gijón conmigo, pero no encontramos ninguno tiempo para ello. Empecé a tirar las cenizas de Sahn y sentí una punzada en el corazón. Sin darme cuenta empecé a llorar, Til se acercó a mí y me dijo: -¿Estás bien? -Sí, esto muy bien. ¿Has sentido el pinchazo en el corazón? -Sí… ¿Por qué ha pasado eso? -Porque la anterior Fuente ha desaparecido y se está formando un nuevo orden en la aristocracia vampirica. -¿Y quién la va a formar? -Los que fueron convertidos por mí, los Inmortales y vosotros dos. -Charlie y yo. -Sí. ¿Qué te parece? -Bien pero… ¿Seguirás los pasos de Sahn? -No voy a despreocuparme por mi familia y vosotros sois mi familia. Nos fuimos a casa tras el ritual, cuando llegamos todos estaban allí incluidos los vampiros. -¿Cómo ha ido Paula? -Bien y creo que los vampiros habéis sentido un pinchazo en el corazón. Los vampiros asintieron e hicieron lo mismo que el consejo y Til la noche en que me convertí en la Fuente. -Por favor no lo hagáis y quedaos a desayunar. Todos asintieron así que empecé a preparar el desayuno para todos ellos.