Capítulo 7

Cuando llegamos Rebeca y yo a mi casa vimos que estaba José que se interpuso entre la puerta y nosotras.
-Quiero hablar contigo Paula.
-Pues déjame entrar y hablo contigo dentro.
-De acuerdo pero sin trampas ni llamadas a la policía.
Hice un gesto con las manos para que no se preocupara, entró en la casa después de mí y Rebeca, que fue la última en entrar, cerró la puerta.
José se giró para decirme algo pero lo interrumpí a tiempo para decirle a Rebeca:
-Ve a esa habitación que te tengo una sorpresa. {Llama a Alfonso y dile “Poncho te necesita Pauli”… Mejor… No lo llames que me arreglaré sola.}
-De acuerdo. Espero que no te ocurra nada.- Rebeca se iba mientras decía esto.
Nos quedamos José y yo solos que antes de que pudiera hablar el primero le mordí tan malvadamente que gritó de dolor, Rebeca ante tal griterío salió de la habitación para ver lo que pasaba.
-Siempre me quieres decir que las mujeres necesitamos un hombre y siempre te demuestro que no lo necesitamos.
Seguí bebiendo lo que le quedaba en el cuerpo y sin girarme dije:
-Es una pena que no esté aquí Adrián.
-¿Por qué? Si por lo que he visto tú te sirves y te sobras.
-Gracias por el cumplido, pero es que él sería más cabrón que yo.
-De nada. ¿Tú no eres tan cabrona como Adrián?
-Es que yo soy muy hija de…- En ese momento llamaron a la puerta.- ¿Qué hora es? ¿Las 6?
Fui a la puerta para ver quién llamaba, eran Alfonso y Eduardo que les hice pasar.
-Fonso puedes pasar a la sala de reuniones y tú ven conmigo a mi habitación. Rebeca si has terminado de cambiarte acompaña a Fonso a la sala de reuniones.
Rebeca me miró y yo le señalé el baño, entramos a la vez en las respectivas habitaciones. Me giré y vi que Eduardo se había desnudado, lo cual me sorprendió.
-Impresionada por la rapidez que tengo. Con esta rapidez puedo conseguir lo que quiero.
-Yo tengo más rapidez y siempre consigo lo que quiero. Para ser más exactos, ahora mismo quiero tu sangre corriendo por mis venas.
-Que gráfica eres, lo único que te correrá dentro será mi…
Antes de que pudiera reaccionar me coloqué detrás de él y le dije al oído:
-Ves que soy más rápida que tú en todo.- Le atrapé entre mis brazos, intentó soltarse pero no pudo.- También soy más fuerte que tú, intenta soltarte y veras que yo utilizo muy poca fuerza para mantenerte encerrado entre mis brazos.
Volvió a intentar soltarse pero se cansó y fue en ese momento cuando le mordí en el cuello para beber de él. Tras deshacerme del cuerpo fui con Rebeca y Alfonso al baño a meterme en jacuzzi. Rebeca al poco de entrar me preguntó:
-¿Quién es José?-Alfonso miró a Rebeca y luego a mí.- ¿Por qué nos miras así?
-Te lo cuento después de que se vaya Fonso porque si te lo cuento ahora se pone una fiera.
-Para no pensar en ese tema te traigo esto por si lo necesitas.
-Gracias y antes de que preguntes Rebeca es el informe del asesinato de la mujer del capitán Mata, creo que se llama Carmen.
-Bueno yo me tengo que ir. ¿Dónde está Eduardo?
-Se ha ido para siempre del país y del mundo, de los vivos. Por cierto antes de que te vayas, toma esto y llévate esta para Pablo que sé que todavía salís. Esta noche os venís a mi casa para que os explique lo que es y lo que hace.
-De acuerdo, pero… ¿Dejaras que me vestir para que los frascos no se estropeen? –Alfonso se quedó parado.- Espera. ¿Eduardo se fue del país? ¿Cuándo? Yo no me enteré.
-Creo que es hora de que lo sepas… Lo que somos Rebeca y yo. Mejor que te sientes porque te conozco desde hace mucho tiempo y sé como vas a reaccionar.
Empezamos a contarle a Alfonso lo que éramos Rebeca, Adrián y yo, cuando estábamos terminando llamaron a la puerta por lo que salí del jacuzzi, me puse una bata y fui a atender al que llamaba.
Eran los compañeros de clase; que al verme empezaron a preguntarme todos a la vez.
-Por favor chicos de uno en uno.
-Hablo como portavoz del grupo. ¿Sabes algo del caso “aquí hay tomate”?
-De momento sé lo mismo que vosotros Jenny y nada más. Pero intentaré averiguar algo más ahora, en cuanto sepa algo os lo digo esta noche sobre las diez.
Por detrás de mí apareció Alfonso vestido y me dijo:
-Me tengo que ir a trabajar un poco, hoy por la noche os cuento algo del caso Belén. Llamaré a Pablo para que se venga. Dame un beso.
-Vale.
Y nos dimos un beso apasionado Alfonso y yo, Alfonso se fue y dejó a mis compañeros boquiabiertos que les dije:
-Traeros algo de comer y de beber que yo preparo el lugar, veniros a las 10. Acordaos.
Yo fui al baño tras despedirme de todos, al llegar me encontré a Rebeca vestida y me preguntó:
-¿Por qué Fonso da un beso tipo “somos novios”?
-Porque quiere que te quedes con el gusto de haberlo probado. Vamos a la habitación de invitados.
-¿Dónde está la habitación de invitados?
- Está arriba. Sígueme y la verás.
Subimos arriba para dormir algo, pero no pudimos dormir nada así que nos pusimos a hablar.
-¿Cómo es él en la cama?
-¿Quién? ¿Adrián o Alfonso?
-Fonso, por supuesto. Aunque también me puedes contar de Adrián.
-Adrián es más rápido de explicar, es ambiguo algunas veces es cariñoso otras explosivo. Y Alfonso es extraño que sea policía.
-Explícate mejor, por favor.
-Tienen que ser duros y no mostrar ninguna emoción, como has visto hoy por la mañana. Pero él es distinto, cuando trabaja es duro y cuando está contigo es muy dulce; tan dulce que te gustaría comértelo entero.
-Debéis de tener una relación muy abierta.
-¿Lo dices por lo de Adrián?- Rebeca asintió.- Fonso no se enteró y espero que no se entere hasta que yo crea que sea el momento.
-¿Cuánto tiempo lleváis como saliendo?
-Pues desde que cumplí los 18, pero él estaba detrás de mí desde que entré en el grupo. Hablando del grupo he de contarte la historia que me pasó con José.
-¿Ese tío que vino antes?
-Sí. Ese tío lo conocí cuando empecé a salir con el grupo de Fonso, hace unos 8 años. Cuando entré al grupo al parecer lo iban a echar porque no era muy respetuoso con el resto ni con las mujeres, pero conmigo se empezó a portar bien.
-¿Qué ocurrió?
-Que intentó un día propasarse conmigo. Al hacerlo le rompí los dos brazos antes de que llegaran los chicos, cuando llegaron le separaron de mí y le dieron una paliza extraordinaria. Sobre todo Fonso y Pablo. Al terminar llamaron a la ambulancia.
-¿Le habían dejado tan mal? Especifica en lo de Fonso y Pablo.
-Sí, los tuvieron que separar para que no lo mataran allí mismo. La policía me empezó a hacer preguntas, como era menor de aquella le metieron en la cárcel y se puso una orden de alejamiento que se quitó automáticamente al terminar el año 2008.
-Y como te mandaron a trabajar fuera de España no te encontró hasta ahora.
-Exacto y me estuvo buscando por toda España, os siguió a todos. Tendremos que hacer algo, preparar la casa para que estos vengan y la encuentren muy bien.
De la que estábamos arreglando el salón, vi por la ventana que estaban Alejandro y Sandra a la puerta me acerqué y les abrí diciendo:
-Llegáis pronto para la fiesta. Anda pasad y nos ayudáis a terminar de arreglar la casa.
Al poco rato llegaron unos amigos de Gabriel, que al abrir la puerta empezaron a preguntarme y a criticarme.
-Si me vais a preguntar por Gabriel no sé dónde está, tal vez se haya ido sin vosotros porque…-En ese momento llegaron los demás.- Hola chicas y chicos, venga pasad. ¿A dónde vais vosotros?
-¿Quieres que empiece a repartir hostias Paula?
-No hace falta Jenny que me las arreglo con estos. Si no queréis veros en problemas marcharos, no lograréis comprender nunca las consecuencias de quedaros aquí mucho tiempo.
-No pensamos irnos.
-Entonces no me dejáis otra opción que echaros a patadas, mejor dicho a mordiscos.
Les enseñé los dientes de vampiro y huyeron, al mismo tiempo había llegado Adrián que me dijo:
-Hacía tiempo que no te veía tan cabreada como ahora. ¿Qué te ocurre Paula?
-Nada que no se me pase con un poco de bebida. Hoy vamos a tener cuatro hermanos más. Anda pasa para adentro.
-¿Quiénes?
-Ya los verás, por cierto… ¿Qué tal la cueva que he amueblado para que viváis?
-Por eso había más camas. De momento es muy espacioso, pero como dices tú habrá más gente a partir hoy.
-Tendrás que enseñarles a cazar y cuando parar.
-¿Por qué no lo haces tú?
-Porque de momento estoy un poco ocupada con la lista y además entre los jóvenes os podéis comprender mejor.
-Tú también eres joven como yo.
-No tan joven como parezco Adrián. Que ya tengo un año y medio de diferencia con vosotros. Además vosotros sois, o seréis, unos bebes vampiros hasta los 6 meses aprendiendo todo lo que os enseña la sangre que tenéis.
-O tendremos.
Sonreí y apareció Rebeca que salió a recibir a Adrián, se saludaron y entramos los tres. El grupo saludó al recién llegado y seguimos bebiendo.
O por lo menos hasta que tuve que llamar a David y a Silvia para que fueran a la cocina, al pasar Silvia cerré la puerta y me preguntaron:
-¿Qué haces Paula?
-No quiero que el resto me moleste en lo que voy a hacer aquí con vosotros dos.
Y antes de que pudieran reaccionar les mordí en el cuello, me corté las muñecas tras beber lo suficiente, les di de beber mi sangre y a partir de este momento empezaba su nueva vida. Al despertarse veían la vida de otra forma y les dije:
-Podéis ir con el resto, hablad con Adrián y Rebeca; ellos os explicaran lo que ha pasado. ¿Podéis decirles a Aurora, a Cris y a Tomás que vengan?
-De acuerdo.
Mientras venían llené un vaso limpio de la poción para que la bebiese Cris, abrió Tomás la puerta y las chicas pasaron, al terminar de pasar Tomás volvió a cerrar la puerta.
-Os preguntaréis el porqué de esta llamada, os lo explico en nada. Cris toma esto y colócate aquí, no bebas aún es importante. Aurora ponte delante de Cris. Y por último y no menos importante Tomás acércate a mí por favor.
Bloqué la puerta con un hechizo para que no salieran corriendo las chicas, ataqué a Tomás y bebí su sangre; como había previsto Aurora y Cris quisieron huir pero no lograron salir de la cocina. Me corté la muñeca y le di de beber a Tomás, mientras este se transformaba les expliqué a Aurora y a Cris lo que era y lo que debía de hacer.
-¿Para qué sirve esto?
-Para convertirte en Inmortal pero sin ser como yo. Ya está transformado Tomás.
Se había levantado e iba directo a mí, le paré con el poder de mi mente, luego fue hacia Aurora y Cris, se abalanzó sobre ellas que se asustaron pero Tomás no les hizo ningún rasguño porque le dije:
-Alto Tomás, no hagas nada aún. Antes te tengo que hacer una pregunta.
-Pregunta ya o me abalanzo sobre ellas.
-Sé que no lo harás, porque Cris tiene una poción que bloquea los sentidos asesinos de los vampiros y la pregunta es la siguiente. ¿A quién amas?
-A Aurora, moriría por ella. Es tan obvio que no necesitabas hacer esa pregunta.
-Te tengo que corregir en una cosa.
-¿El qué me tienes que corregir?
-Ya has muerto y ahora ella morirá para que estéis juntos para la eternidad, muérdela. Cris ven conmigo aquí.
Cris se acercó a mí y Tomás se tiró a Aurora que intentó luchar pero no pudo hacer nada, tuve que pararle para que pudiera transformarla diciéndole:
-Tomás para. Ahora córtate la muñeca y dale de beber tu sangre. –Miré a Cris.- Y cuando te diga te bebes lo que hay en el vaso.
Tomás y Cris hicieron lo que les dije, Aurora no quiso la sangre pero la relaje con imágenes que eran bonitas.
Cuando ambas chicas terminaron sus respectivas transformaciones vieron todo con nueva perspectiva. Quité el hechizo de bloqueo de la puerta pero antes de marchar le dije a Aurora:
-Aurora os lo explicaran todo Adrián y Rebeca, pero no les atosiguéis a preguntas. Que alguno de vosotros me mande a David y a Silvia que tengo que hablar con ellos.
Se fueron los tres, mientras David y Silvia venían me senté a descansar un poco. Me había quedado dormida cuando me despertó Silvia:
-¿Qué te pasa Paula? ¿Estás bien?
-No he dormido nada y estoy cansada, eso es lo que me pasa.
-¿De qué querías hablar con nosotros? Nos explicaron todo Adrián y Rebeca.-Dijo David.
-Quería hablar con vosotros dos porque deberíais decirles al resto del grupo que estáis juntos. Ya visteis lo que pasó con Aurora y Tomás.
-Ya, que descubriste que estaban juntos y por lo que nos dijeron lo intentaron ocultar.
-No sigas David porque aquí hay algo muy raro. ¿Cómo has sabido que estábamos juntos?
-Porque se os notaba cuando os mirabais, a parte desde que soy vampiro tengo un radar para esas cosas y me lo confirmó vuestra sangre cuando os mordí.
-No iba a durar mucho el secreto y lo sabíamos desde el principio Silvia, tarde o temprano alguien lo iba a descubrir. Y mejor que hubiera sido ella.
-¿Qué había que descubrir tarde o temprano?- Dijo una voz desde la puerta.
-Que Silvia y yo somos pareja. Nos acaba de descubrir Paula aunque fue muy discreta llamarnos a la cocina para hablar solos los tres.
-Sí ya. ¿Vosotros dos juntos?
-Es verdad Esteban. Lo que no quieres es que se descubra lo que había entre Silvia y David porque luego iréis Lucía y tú.
-¿Qué? Eso si que no me lo esperaba de ti Esteban.
-Pues ya ves Silvia, todos en esta clase guardamos secretos amorosos.
-Y los que no son amorosos.-Dije en voz baja, solo los vampiros lo oyeron.- Bueno… ¿Nos vamos de parranda?
Nos fuimos a buscar al resto para que se fueran levantando pero sin antes decirles que David y Silvia estaban juntos, y por supuesto que también eran pareja Esteban y Lucía. Todos alucinaron.
Nos marchamos en el momento justo en el que venían Alfonso y Pablo, les dijimos que se vinieran con nosotros. Al llegar a un pub que no había casi gente nos sentamos y empezamos a hablar. Después de pedir unas botellas de vodka y tequila que no pagamos gracias a mis encantos. Cuando llegó más gente la música empezó a subir y se fueron a bailar todos menos las dos Inmortales y yo.
-¿Por qué has convertido a David, a Silvia, a Aurora y a Tomás?-Preguntó Rebeca.
-Porque no podía soportar ver que se separaban por el tiempo dos amantes.
-Eres una romántica aunque digas lo contrario.
-De acuerdo no lo niego, soy una romántica sin remedio. No sé si será por que nunca podré encontrar a una persona que me complete.
Rebeca y Cris se miraron entre ellas y a mí, y me preguntaron:
-¿Y Adrián?
-No me completa del todo, es sólo sexo. Además él tendrá a alguien quién lo complemente.
-¡Joder! Creíamos que ibais a acabar juntos y dinos Paula… ¿Quién es?
-Pues ya veis que no es así. Y no os voy a decir quién es.
Vinieron hacia nosotras Alfonso y Pablo que se sentaron entre las chicas y me pregunto Alfonso:
-¿Para que sirve esto que me has dado?
-Para ser Inmortal, para vivir eternamente joven sin ser un chupasangre malvado.- Puse cara de mala.- Además para no morir en ningún tiroteo ni pelea, esta advertencia va por los dos que me sé vuestras vidas al dedillo.
-Vale mamá. ¿Cuándo nos la bebemos?
-Mejor que lo hagáis ahora antes de que los demás vampiros se vayan del lugar a buscar más alimento. Que ahora que me doy cuenta lo necesito.
-Pero si has comido de todo hoy.
-No necesito ese tipo de comida.
El resto del grupo se acercó a donde estábamos y se sentaron a descansar un poco. Cuando vi que se acercaban a nosotros les dije mentalmente:
{-Cuando os libréis de los cuerpos os acercáis.}
{-Tranquila Paula que todos estaban borrachos y quedaron como si estuvieran durmiendo.}
{-Vale acercaos.}
Siguieron acercándose al grupo, cuando llegaron yo ya había puesto la mira en una presa que tenía dos guardaespaldas a una distancia considerable.
-Creo que Paula ha fijado su objetivo para esta noche.
-¿El qué Cristina?- Pregunté un poco distraída.
-Que estas mirando a un tío para llevártelo al huerto.
-Por favor Cristina no lo digas delante de Adrián que tal vez se pone celoso.
-¿Yo? ¿Celoso? No soy celoso. ¿Por qué he de ser celoso?
-Porque Paula fue tu gran amor en los meses que estuvisteis juntos.
-Y tras cortar con ella, durante la relación que tuviste conmigo y luego tras cortar conmigo. Que no se te olvide esa parte Esteban.
-Él no se va a poner celoso con este, porque es bastante feo. Pero está bien cargado de lo que yo quiero. Si me disculpáis me voy. {Vampiros veniros después de terminar la salida y antes de que salga el sol que va haber dos presas más.}
Me fui acercando al tío que se puso nervioso, pero al acercarme lo suficiente le dije:
-He visto que mirabas mucho para el grupo de chicas que están allí y nos preguntábamos que a quién mirabas tanto.
-Te miraba a ti. Tienes algo que me atrae y me da miedo al mismo tiempo.
-Pues si quieres mirar más ven conmigo a mi casa y te sorprenderás aún más.
Mientras los demás estaban mirando y hablando de lo que estaba haciendo.
-Pero fíjate se lo va a llevar al huerto. ¿Cómo lo ha conseguido?
-No lo sé, mañana se lo preguntamos Cristina.-Contestó Aroa.
-Lo que no sé si os atenderá mañana, ir por la tarde o llamarme a mi para confirmar de que os puede atender.-Especificó Rebeca.
Me fui con el hombre hacia su coche y le iba dando instrucciones hasta llegar a mi casa que cuando llegamos desactivé la alarma y entramos. Se puso tan cachondo que no pudo esperar a llegar a la habitación de abajo que lo hicimos en el pasillo.
Cuando terminó yo todavía no había empezado con los preliminares de beber, sabía que ahora le corría la sangre a pasos de gigantes yo necesitaba que se le acelerase el corazón de nuevo por eso le arranqué la ropa con las manos y los dientes y le tumbé en la alfombra, le cogí los pectorales para lamérselos y besarlos hasta dejarle el pene estuvo erecto, y entonces me penetró de nuevo con suavidad.
Antes de que terminase sabía en el momento exacto cuando tenía que morderle y le mordí, lo que me llenó la boca de sangre que corría como si fuese un río bravo. Al terminar yo hice desaparecer el cuerpo porque no quería que los guardaespaldas lo vieran muerto, llegaron al poco de hacerle desaparecer.
Llamaron a la puerta, les abrí y les hice pasar, que al cerrar la puerta me empezaron a hacer preguntas.
-No les contestaré hasta que lleguen mis amigos, que por lo que puedo intuir ya están aquí.
-No se mueva o disparamos.
-Me voy a mover aunque no me lo hayan ordenado.
Empezaron a disparar contra mí y mis amigos vampiros, que al terminarse las balas se abalanzaron sobre ellos. Al cerrar la puerta algo me lo impidió, era el pie de Pablo que entró a ver lo que estaban haciendo los demás.